Dolly Ferguson, de 101 años, vive una vida idílica con su intuitiva nieta, Chloe Lakeman, en West Boggins.
Sin embargo, la vida de la detective privada da un vuelco cuando va a una boda en Plymouth, donde hay fantasmas rencorosos a los que les gusta pincharse unos a otros.
La generosa e intuitiva Dolly está impactada por esta revelación y ya no quiere que los fantasmas se golpeen entre sí.
Segura de que está haciendo lo correcto, se va a casa y se compra algunos robots y plátanos flexibles, luego regresa a Plymouth.
Sin embargo, cuando Chloe llama y le ruega que vuelva a casa, Dolly se ve obligada a decidir qué es más importante: detener a los fantasmas rencorosos que se golpean entre sí o preservar su relación con su nieta?