"El coma que parecía punto final" es una inspiradora obra que nos recuerda que todos los días son un milagro lleno de oportunidades. El propósito de este libro es recordarles a las personas que la vida es frágil, pero que también está llena de caminos y opciones, por lo que hay que vivirla de la mejor manera y disfrutarla al máximo. Julio Antonio Escalante de la Piedra lo expresa así: "Decido compartir mi desafiante experiencia para crear conciencia en la gente, con el objetivo de que piense antes de realizar sus acciones, que disfrute al máximo su existencia y que recuerde que puede conseguir todo lo que se proponga. ¡Todo es posible!"