La meta principal que las madres y los padres debemos tener es cultivar en nuestros hijos y nuestras hijas el amor a Jesús, aquel que lo dio todo por nosotros. Que aprendan a hacer de su Salvador el centro de su vida. Las lecturas devocionales de este libro permitirán, a los más pequeños del hogar, jugar y aprender las grandes verdades que Dios quiere compartir con nosotros mediante su Palabra, la Santa Biblia. Cada día podrán cultivar, en familia, una relación feliz e incomparable con el Padre celestial.