Curioso este alegato que nos trae Antón Chéjov con su "Un dvornik inteligente", en el que lo que parece no es... o quizá sí. Alegato, de acuerdo, pero, contra qué? Se admiten apuestas. Aunque quizá debamos quedarnos con una pregunta más sencilla: cuándo tiene razón el dvornik? Es posible que... nunca?