Encontrarse cara a cara con la vida salvaje es emocionante, pero esto, no es fácil. Cuando Camilo viene a visitar a su amiga Malena, él no puede esperar a ver toda la vida salvaje que el bosque tiene que ofrecerley está decepcionado cuando todo lo que ve, son unas cuantas aves. Juntos, los chicos salen de viaje en una caminata y encuentran abundantes señales de animales a lo largo del camino. Por medio de la observación y de su conocimiento del comportamiento animal, Malena ayuda a Camilo a aprender lo que significa cada señal: alguien ha estado aquí, alguien lo ha hecho.