¡Arde, bruja, arde! es una de las obras más logradas de Abraham Merritt (1884-1943), celebrado escritor de la fantasía del siglo XX. Lo que comienza como la narración de una investigación médica termina convirtiéndose en una historia de terror, pues lo que parecía una cadena de muertes accidentales no es sino el resultado de la siniestra maquinación de Madame Mandilip, una bruja que hace muñecas animadas de sus víctimas. Solamente la intervención del doctor Lowell, ayudado por el mafioso Ricori, frenarán sus malignos designios.
Karl Edward Wagner, especialista estadounidense en ciencia ficción y terror, incluyó a ¡Arde, bruja, arde! en su lista de "Las trece mejores novelas de terror sobrenatural" en la edición de mayo de 1983 de la revista The Twilight Zone.
En 1936 fue llevada al cine con el título de The Devil-Doll dirigida por Tod Browning y protagonizada por un travestido Lionel Barrymore y Maureen O'Sullivan como su hija, Lorraine Lavond. Este filme se ha convertido en una película de culto .