Hay una guerra espiritual teniendo lugar en nuestro mundo. Y esta guerra se libra por nuestras almas.
Es una guerra entre el Bien y el Mal.
El autor está convencido de que por muchos males que los hijos de las tinieblas sigan creando e inventando para dominar a la humanidad en este mundo, la verdadera batalla que decidirá si somos afectados o no individualmente y con nuestras familias más cercanas por toda esta vorágine del mal, es la batalla que debemos librar en lo personal contra el maligno, y cómo podremos derrotarlo con la ayuda de Dios o sucumbir a las tinieblas a través de nuestra ceguera y rechazo egoísta de la oportunidad de Dios para nuestra salvación.
El autor presenta algunas estrategias que nos han brindado quienes han logrado acercarse a Jesucristo y aprender de Él cómo vencer a Satanás y su mundo oscuro durante nuestra existencia diaria.
Jesús, nuestro buen pastor, no abandonará jamás a sus ovejas, y estos son los tiempos en los que ha abierto la puerta a sus ovejas que lo escuchan. 'Él es la puerta y si entramos por Él, seremos salvos y tendremos vida porque el buen pastor conoce a los suyos, y los suyos le conocen a El'.