Carl Jung no fue exclusivamente un psiquiatra, ni solamente un profundo investigador de los mitos y leyendas con los que la humanidad anterior a nuestra época imaginó los dos universos: el exterior y el interno, que los hombres concibieron no como separados, sino como interrelacionados y definitivamente partes de una misma unidad. Jung fue, definitivamente, uno de los más audaces investigadores del imaginario del hombre del siglo XX, sus ideas y aportes, sus concepciones teóricas y aquello que muchos le reprocharon en vida, el que "dejara siempre abierta una ventana al infinito" se torna el mejore elogio para alguien que estuvo perma-nentemente atento a develar las incógnitas que perduran más allá de la llegada de nuestro desconcertante siglo XXI. Fue Jung quien comprendió que los esquemas del materialismo no bastan para medir los oscuros parajes que dominan el continente de aquellos que, casi paradójicamente, somos los creadores tanto de lo mítico como de lo científico. Esa cualidad tan criticada de ser alguien atento siempre a lo metafísico, a lo que escapa a las reglas y medidas de la física, es justamente su mejor galardón. Su vida y su extensa obra intentan ser reflejadas en este libro como un primer acercamiento a un autor fundamental del pensamiento contemporáneo.