Conquistador de los mares:

Fernando de Magallanes, también conocido como Hernando de Magallanes nació en 1480 en Mactán-Portugal, y murió en Filipinas el 27 de abril de 1521. Fue un militar, explorador, marinero y navegante de linaje noble. Debido a su brillante carrera naval fue nombrado por la Monarquía Hispánica adelantado y capitán general de la "Armada para el descubrimiento de la especería" y comendador de la Orden de Santiago.

En 1519, Magallanes inició al servicio de Carlos I, la expedición naval que descubrió el canal natural navegable que hoy recibe el nombre de Estrecho de Magallanes, realizando la primera navegación de origen europeo desde el océano Atlántico hasta el océano Pacífico, llamado hasta entonces mar del Sur.

Aunque Magallanes murió en esta expedición, el azaroso recorrido se convirtió en la primera circunnavegación de la Tierra cuando una de sus navíos, capitaneado por Juan Sebastián Elcano, regresó a España en 1522.

La concreción del sueño de Magallanes inició en 1517 cuando fue a Sevilla con Rui Faleiro y encontró en Juan de Aranda de la Casa de Contratación sevillana, un aliado importante para el proyecto de dar a España la posibilidad de llegar a las Molucas por occidente, sin atravesar mares vedados a los portugueses por el Tratado de Tordesillas y, además para probar que las "islas de la especiería" se encontraban en el hemisferio castellano. Finalmente consiguieron la aprobación del rey Carlos I quien autorizó la expedición un año después, con las siguientes gabelas para los exploradores:

1. Nombramiento como gobernadores de las tierras e islas que encontrasen, con el cinco por ciento de las ganancias netas que resultasen.

2. Vigésima parte de las ganancias del viaje.

3. Derecho a retener mil ducados sobre los próximos viajes, pagando solo cinco por ciento sobre el excedente.

4. Concesión de una isla a cada uno, excepto de las seis más ricas de las cuales no recibirían más que una decimoquinta parte.

Los lentos preparativos para el viaje de Magallanes se colmaron de incidentes, tales como insuficiencia de fondos, maniobras del rey de Portugal, Manuel I, que procuraba encarcelar a Magallanes, desconfianza de los castellanos hacia el avezado marinero y los otros portugueses involucrados.

Superadas todas las dificultades previas y los consuetudinarios motines a bordo tan comunes en esa época, una vez que le los expedicionarios encabezados por Magallanes llegaron a la boca del que sería el estrecho de Magallanes, quien ordenó a las naves Concepción y San Antonio explorar el canal. La nave San Antonio, con Álvaro de Mezquita se adelantó, momento en el que el piloto Esteban Gómez y el tesorero Jerónimo Guerra deponen a Mezquita para desandar el camino por la noche y regresar a España. La nave Concepción al mando del capitán Juan Serrano atraviesa el canal y espera en vano a la nave San Antonio. Cruzarlo fue muy difícil, dado lo complicado de las costas. Una vez terminadas estas minuciosas etapas consiguieron salir del "laberinto" hacia el mar del Sur. Magallanes habría logrado la hazaña de descubrir un punto de unión marítimo entre dos mundos. Por eso pasó a la historia como un gran marinero y un líder colmado de fortaleza mental y física.

Pese a que Magallanes descubrió la ruta, solo hasta finales de la década de 1520, el reino de Castilla logró el monopolio de la misma.

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