A pesar de los años transcurridos desde que la autora presentó estas reflexiones dentro del ciclo "Man and Nature", sus ideas mantienen su frescura y nos afectan más que nunca. Desde su larga y madura experiencia como antropóloga, Margaret Mead interroga en esta obra la esencia de la Historia en tanto proceso de transmisión de saberes y valores.
Cuáles son los compromisos que hoy en día pueden asumir todavía las generaciones jóvenes con los legados del pasado?, se pregunta la autora.
Y este texto es una invitación y un desafío para reflexionar sobre el incierto e inquietante devenir de la humanidad.
En palabras de Verena Stolcke en el prólogo, Mead defiende que " ni la adolescencia ni las otras etapas de la vida debían ser interpretadas como una experiencia individual, sino que consisten siempre en una relación sociocultural variable y característica de una sociedad específica y dependen asimismo del tejido y de las estructuras de parentesco que prevalecen".