El primer factor que puede explicar por qué la mayoría de las personas no son ricas son las creencias erróneas sobre la riqueza y las creencias colusorias entre las creencias negativas y las positivas.
Básicamente, el cerebro humano siempre trata de encontrar el placer y evitar el sufrimiento. Si algo está relacionado con el sufrimiento, tenderemos a evitarlo. En cambio, si algo tiene una fuerte relación con el placer, nos acercaremos a él. Si algo se asocia al placer y a la dificultad, nuestro cerebro se confundirá o será neutral.
Las creencias son como el imán. Si la creencia positiva se mezcla con las negativas, no hay más "polar positivo" o "polar negativo". Nuestras mentes serán neutrales o se confundirán como un metal normal.