El auténtico conocimiento interior va más allá de formulismos y prejuicios establecidos. Conocernos, saber el lugar que nos corresponde y ocuparlo, constituye la tarea más importante de nuestras existencias aquí en la Tierra. Es una labor meticulosa, constante, de atención permanente, de aceptarnos y amarnos tal como somos.
Vivimos sintiendo la dualidad a diario; de ahí la necesidad de aprender a elegir y qué se nos puedan dar situaciones de atracción-rechazo casi al mismo tiempo.
Dentro de la dualidad, podemos tener maestros agradables u otros que nos provoquen sufrimiento. Por algo están ahí. Confiad en vosotros y atreveos a ser capaces de manifestar vuestra inteligencia, vuestra bondad, toda vuestra valÌa humana; procurad vivir con alegría y amor en vuestro corazón.