La palabra Pentecostés proviene del Griego "Pentekostos" que significa (cincuenta); y era una fiesta judía anual también conocida como la "Fiesta de las Semanas", que era la Fiesta de las Primicias de la Cosecha. Era una fiesta que se celebraba cincuenta días después de la Pascua y todos los judíos, tanto los que vivían en Jerusalén como los que vivían lejos, venían a celebrar esta fiesta dada su importancia. Por eso había tanta gente el día de la venida del Espíritu Santo en la fiesta de Pentecostés. Entonces, con el descenso del Espíritu Santo, vivimos en la dispensación del Espíritu Santo, y Él vive en la iglesia ayudándonos a llegar al Cielo. La presencia del Espíritu Santo en nuestros corazones nos da la alegría de vivir y de alabar a Dios, hasta la venida del Señor.