Como empresario, su deber de garantizar, razonable y eficazmente, la protección de la seguridad y la salud de los trabajadores de su empresa es un gran desafío y una gran responsabilidad. Los accidentes y las enfermedades que afectan a los trabajadores no sólo dañan la salud del trabajador, sino también el éxito en la gestión de la empresa. Las horas de trabajo perdidas por accidentes y enfermedades, así como los materiales dañados (por ejemplo los destrozos en los equipos y productos elaborados) interrumpen la continuidad del proceso de trabajo. La falta de organización, por ejemplo, en la preparación del trabajo causa con frecuencia tensiones innecesarias y trabajos precipitados, que pueden dar lugar a accidentes y enfermedades. El sector marítimo al igual que cualquier otro sector empresarial, esta unido a una búsqueda de beneficios. Obviando muchas veces las mejora de las condiciones laborales y la influencia que puede ejercer en los tripulantes. Es importante recalcar la importancia del capital humano, las personas deben ejercer sus habilidades con eficacia y eficiencia. Una mayor claridad de los objetivos propuestos, responsabilidad de las personas y una mayor libertad en la elección de medios y métodos para alcanzar los objetivos serán vitales. La supervivencia de las empresas en el nuevo siglo dependerá en buena medida de todo esto. Calidad y productividad.