La historia transcurre principalmente en el Flandes francés, en la ciudad de Douai, y se centra en la historia de Balthazar Claës y su familia más cercana en los años que van desde 1812 hasta 1832. Como en muchas otras obras de Balzac, el estilo es muy desarreglado. Así, la novela empieza con unas extensas descripciones, muy evocadoras, en las que el autor traslada al lector al Flandes francés mediante la historia de la familia Claës.