En la Odisea, la vuelta a Ítaca, Ulises y Penélope viven una etapa crucial de sus vidas unidos en un destino común. Son dos naves surcando el mismo mar, viajando en paralelo sin llegar a encontrarse espiritualmente nunca. Ella en el hogar y él intentando volver.Él en su viaje hacia la realidad exterior para conquistarla y ella esperando en la intimidad del ser a que ese ímpetu del varón se resuelva, se serene y se vuelva hacia sí mismo, en una conquista interior que llega a veces muy tarde y sin las fuerzas físicas para disfrutarla y compartirla. Una historia que mira hacia objetivos vitales diferentes. Un encuentro que se anhela, se percibe en el horizonte y que nunca llega. Un desencuentro que es la atmósfera vital de tantas mujeres conscientes como Penélope. El leit-motiv de este poemario de mujer.