Esta pieza de teatro se inspiró en los eventos durante los tres años que pasé en España como estudiante. Estuve involucrado tanto en la escritura como en la pintura. En el Colegio Mayor de Guadalupe en Madrid donde me alojé, conocí a pintores mexicanos, argentinos, chilenos y otros de América Latina y me inspiré otra vez a pintar. Había dos pintores con los que estaba cerca. De hecho, los dos personajes principales de esta obra llevan sus nombres: Edsel y Bobby.
Incluso antes de ir a España en 1965, incursioné en la pintura abstracta, influenciada por mi primo, Boy Aguinaldo, un pintor abstracto. Fui influenciado por pintores abstractos como Jackson Pollock y otros. Me animaron a seguir pintando y participé en muchas exposiciones en el Colegio y en el Instituto de Cultura Hispánica. Estuve particularmente cerca con Edsel y Bobby, quienes interpretan a los personajes principales en esta obra. Aunque he situado esta obra en Nueva York, los acontecimientos de este drama tuvieron lugar en Madrid. Antes de irme a Canadá, el director del Colegio Mayor, Antonio Amado, me encargó que pintara un mural en el Colegio lo cual se refleja en la imagen de portada de este libro, una foto que tomé cuando visité Madrid en 2005. Recibí muchos comentarios controvertidos. En una carta que Antonio me envió cuando ya estaba en Canadá, dijo que alguien comentó que mi mural era una versión abstracta de El sitio de Breda de Diego Velázquez. En aquellos años, España no estaba interesada en la pintura abstracta y muchos no podían aceptar el mural. Naturalmente, después de la muerte de Franco, las cosas cambiaron culturalmente en España y fueron aceptadas por fin las pinturas contemporáneas y abstractas.