Francisco Hernández, uno de los mayores poetas vivos de México, nos muestra su vida cotidiana con la Depresión, perra que lo ha acompañado en un largo trayecto y a quien le dedica por entero este volumen de poemas, uno de los más inmediatos, sencillos e intensos de su vasta producción literaria. No obstante, la Depresión es otra manera de decir la vida y sus constantes, las lecturas del autor y hasta los juegos que produce la cercanía con quien ya forma parte del entorno familiar, por dolorosos que resulten sus ladridos.