Tiene por objetivo que los participantes queden convencidos de que la motivación es un fenómeno humano de gran trascendencia para los individuos y para la sociedad, además de que queden fuertemente motivados para aprovechar al máximo el seminario, dedicándole el empeño que merece una tarea de suma importancia y utilidad. Los seres humanos actuamos siguiendo determinados móviles y buscando determinados fines. Cuando visitamos a alguien, cuando compramos algo, cuando emprendemos un viaje, cuando pedimos un favor, cuando hacemos un favor, siempre obedecemos a motivaciones de diversos géneros. Somos madejas de dinamismos psíquicos: nuestros instintos, necesidades, deseos, propósitos, intereses, aficiones, simpatías, antipatías, fobias, gustos, son otros tantos resortes y motivos de nuestras conductas. La motivación es un tema humano universal; interesa al psicólogo, al filósofo, al educador, al moralista, al jefe que necesita "hacer que su gente haga", al vendedor que se empeña en despertar en los clientes la voluntad de comprar, al historiador que debe comprender el encadenamiento causal de los sucesos, al padre de familia que cumple la tarea de estimular la buena conducta de sus hijos. Interesa a todo mundo. Toda la vida es motivación: la motivación es "el trasfondo psíquico, impulsor, que sostiene la fuerza de la acción y señala su dirección" dice F. Dorsch, el autor del famoso Diccionario de Psicología.