A casa de Adrián llega un sillón de masaje que parece contener la solución a sus problemas en el colegio. Tiene dificultades con las matemáticas y además hay un niño, Hugo, que le impide jugar con sus compañeros y le hace la vida imposible. Pero algo provoca que aquella circunstancia empiece a cambiar: siente un poder desconocido que le permite hacer frente a sus problemas. Adrián vive feliz con la secreta seguridad de resolver sus dificultades gracias a sus amuletos. Hasta que, un día, la fuente de su solución mágica se desvanece y Adrián tiene que encontrar por sí mismo el modo de ser respetado en el colegio y sentirse valioso.