Quique y Teo acaban de volver de Roma de vacaciones, y el topo Felipe los espera impaciente en el jardín. Gracias a su reloj mágico, esta vez podrán viajar hasta la Roma de la Antiguedad! Una vez allí, los tres visitarán los diferentes lugares de la ciudad y conocerán las construcciones más emblemáticas.
Además, también aprenderán que, en la época de los romanos, las letras también servían para contar, y ayudarán a Marcos, el hijo del cónsul, a encontrar las letras desaparecidas que alguien ha escondido en diferentes sitios de la ciudad.